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5 de octubre de 2012

E tu vivrai nel terrore! L'aldilà (1981)

Tras haberse hecho de un cierto nombre como director de comedias, spaghetti westerns y giallos, el director italiano Luico Fulci finalmente alcanzó reconocimiento internacional en 1979 con "Zombi 2", su muy personal visión del subgénero zombie (el "2" del título fue resultado de que la productora la vendió como secuela al clásico de Romero "Dawn of the Dead"). Fulci regresaría al género de horror al año siguiente con la muy violenta "Paura Nella Città Dei Morti Viventi" ("Las Puertas del Infierno"), donde usaría los temas del subgénero zombie para explorar conceptos metafísicos como el infierno y la vida después de la muerte en un estilo más cercano al surrealismo. Lo que Fulci comenzó con "Las Puertas del Infierno" sería expandido aún más en su siguiente obra, "L'aldilà" (literalmente "El Más Allá", pero conocida en México como "Las 7 puertas del infierno"), segundo filme de la ahora conocida como "trilogía de las Puertas del Infierno" (la tercera sería "Quella villa accanto al cimitero" ó "La mansión cerca del cementerio"). De entre la variada filmografía de Fulci, "L'aldilà" se ha vuelto película de culto y es considerada como su obra maestra. Y no sin sus razones.

La historia comienza en Louisiana, 1927, cuando una turba enardecida se reúne afuera del hotel Siete Puertas decididos a asesinar a un artista llamado Schewick (Antoine Saint-John), acusado de practicar la brujería. Schewick es brutalmente crucificado y como resultado, una de las Siete Puertas del Infierno es abierta. Las puertas conectan el mundo de los muertos con el de los vivos, por lo que los habitantes del pueblo deciden sellar el sótano esperando contener las fuerzas del mal dentro. 54 años después de la muerte de Schewick, una joven llamada Liza (Catriona MacColl) llega desde Nueva York tras haber heredado el hotel Siete Puertas. Liza tiene planes de reabrir el hotel, pero los trabajos de restauración reactivan el portal al Infierno y pronto extraños accidentes comienzan a ocurrir. El Dr. John McCabe (David Warbeck) llega a la escena a ayudar a un trabajador lastimado y se vuelve amigo de Liza. Ambos se enfrentaran a las fuerzas del mal que han cruzado el portal, y su única ayuda vendrá de una extraña mujer ciega (Sarah Keller) que parece saber mucho de lo que está ocurriendo.

Basada en una historia del afamado escritor italiano Dardano Sacchetti (colaborador frecuente de Fulci y escritor para muchos de los más importantes cineastas de horror de los 70s y 80s) y adaptada a la pantalla por Giorgio Mariuzzo, Lucio Fulci y el mismo Sacchetti, "L'aldilà" es una pesadillesca historia de horror sobrenatural que, aunque aparentemente un filme típico de horror, pronto se mueve hacia el reino onírico a medida que la historia se desarrolla. Altamente simbólica y surreal, la narrativa es difusa, casi no lineal, más interesada en el efecto de su imaginería visual que en una narrativa tradicional. El efecto en general resulta más parecido a ver una pesadilla, donde la lógica tiene un papel secundario frente a la atmósfera y el simbolismo transmitido por las imágenes. El género zombie es solamente la base para hacer una meditación oscura sobre el más allá. Ciertamente es una idea ambiciosa y arriesgada, pero Fulci y Sacchetti crean una historia poderosa que, aunque aparentemente incoherente, a primera vista, realmente transmite la sensación de ser una pesadilla reflejada en celuloide.

Mientras que en "L'aldilà" el director Lucio Fulci va hacia conceptos más metafísicos temáticamente, estilísticamente permanece fiel al mismo brutal y cuidadosamente detallado "gore" que ha mostrado con anterioridad. Sin embargo, en "L'aldilà" lleva su gusto por el gore violento a un nivel artístico más alto, resultando en secuencias muy creativas que no son sólo inquietantes y horrorizantes, sino que también poseen una extraña belleza etérea. A pesar del bajo presupuesto con que trabajó en el filme, los efectos especiales de Germano Natali son en general bastante efectivos (aunque una escena relacionada con arañas es particularmente muy pobre). "L'aldilà" también se beneficia de un trabajo de fotografía bastante bueno realizado por Sergio Salvati (otro de los colaboradores usuales de Fulci), quien realmente captura la ominosa atmósfera de perdición que tiene el film, aumentando la sensación de estar viendo una pesadilla vuelta realidad. La narrativa de Fulci es, como su guion, más simbólica que lineal, por lo que podría parecer un tanto inconexa. Sin embargo, hay una fuerte visión artística que da coherencia a la historia como una atmosférica historia de horror.

Ciertamente, uno de los elementos más débiles en "L'aldilà" es la calidad de las actuaciones, la cual no es la mejor que puede verse en el horror italiano. Para empeorar las cosas, la labor de doblaje (común en el cine italiano de esa época) hecha en el filme es terrible, haciendo que los actores suenen aún peor. Sin embargo, vale la pena destacar que la actriz británica Catriona MacColl realiza un trabajo bastante bueno como Liza, l protagonista, y realmente mantiene el filme a flote a pesar del desastre que es el doblaje (MacColl aparecería en las tres cintas de las "Puertas del Infierno"). La actriz italiana Ciniza Monreale también hace un buen trabajo, interpretando a la misteriosa ciega Emily. Aunque el doblaje demerita sus actuaciones, se puede decir que ambas realizan bien a sus personajes, haciendo las mejores actuaciones de la cinta. Tristemente, no se puede decir lo mismo de David Warbeck, quien aparece blando y mediocre. De hecho, Al Cliver (nombre familiar en el horror italiano) hace un mejor trabajo a pesar de tener un rol mucho más pequeño.

"L'aldilà" tuvo una fría recepción cuando fue estrenada en los Estados Unidos en 1983 (dos años después de su premiere Europea), pero esto podría adjudicarse en gran medida al terrible doblaje, a que tenía una inferior pista musical y sobre todo, a que estaba duramente censurada (en una versión titulada "Seven Doors of Death"), resultando en una versión muy diferente a lo que Fulci había pensado. Y aunque "L'aldilà" no es exactamente un filme sin defecto, es una arriesgada película de horror sobrenatural que intenta ir más allá de los típicos clichés del género y tiene éxito en crear una experiencia altamente atmosférica. Quizás su rasgo más difícil de apreciar sea su deliberadamente elíptica narrativa, que podría parecer vaga en le mejor de los casos (e ilógica en el peor). Sin embargo, los diversos huecos de la narrativa simbolizan el desdoblamiento de la lógica y la realidad a medida que las fuerzas sobrenaturales comienzan a afectar el mundo normal. Como se mencionó antes, "L'aldilà" se construye con la lógica de una pesadilla: la narrativa organizada en símbolos en vez de en una ordenada secuencia de eventos.

Aunque quizás es un filme difícil dada su estructura inconexa y ambiciosa, "L'aldilà" es un filme de horror bastante gratificante gracias a su ominosa atmósfera y a sus inteligentemente concebidas secuencias de violencia. Todos los elementos que forman parte del estilo Fulci aparecen en su mejor forma en esta cinta, y no sería exageración llamar a "L'aldilà" el epítome de la altamente idiosincrática visión del horror del director italiano. Ciertamente, la atípica forma en que la trama está estructurada podría no ser del agrado de todo mundo, pero una vez que uno es atrapado por su pesadillesca belleza surreal, "L'aldilà" es una poderosa experiencia onírica. "L'aldilà", ó "Las 7 puertas del iniferno", es realmente una obra maestra del horror que los seguidores del género no deberían perderse. Es realmente un bello, espeluznante e influyente ejemplo de horror metafísico.

9/10
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